de una canción, su vida
de su vida, una historia,
cada historia que nos cuenta, nos hace pensar o mas bien nos hace vivirlas, a través del rock su música se engalana, a veces, de bellos pasajes y de bellas letras, en otras nos muestra su rabia contenida, pero sobretodo nos regala su pasión, que es su música.
Desde que lo conozco no ha parado de sorprenderme canción a canción. No busca un fin, no busca un disco, no busca conciertos (aunque todo se andará y por suerte ya tenemos una fecha, 20 de Diciembre en el teatro Echegaray de Malaga). Yo digo que es un privilegiado, como tantos músicos, que ama la música y es capaz de relatarnos a través de una canción cualquier historia, es un apasionado del rock y lo demuestra en cada nota, en cada canción.
Todo comenzó el día que oí su primera canción ‘Don’t cry, Mama¡’ donde cuenta la historia desesperada de un padre por salvar a su familia durante la guerra y no puede; y si a esta historia la rellenas de buen rock no le faltara nada para ser un cañonazo de canción.
Después me tembló el corazón cuando oí ‘Marta’s song’, una canción apasionada llena de dulzura, balada sentimental donde también podríamos poner otro de los temas con el que realmente me conquisto ’Damaris’, un mensaje verdadero de amistad.
Temas como ‘Broken dreams’ donde vuelve a nacer el mejor rock y ‘Take my love’ una canción donde se mezcla el mas puro sentimiento con una rabia indefinida como final.
Y la ultima que me llego ‘Neverland’, a la que denominamos ‘Pepinazo’ pues es eso, un pepinazo de canción, es un hit del mejor rock puro y duro. Podríamos decir que es un autorretrato del momento en que se encuentra.
Manuel Ibáñez, músico y compositor malagueño, cuenta una historia, crea la canción y la regala a su publico, entra en su sitio, un paisaje sin igual, adéntrate con el y disfruta en http://manuel-ibanez.webgarden.es/.
FrancisFox
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